La actriz y modelo Pamela Anderson fue galardonada el sábado en la Gala anual del Centro LGBT de Los Ángeles por su resistencia y su inquebrantable compromiso con el activismo LGBTQ+ a lo largo de su carrera. Anderson, conocida por su emblemático papel en “Baywatch” y sus memorias recientemente publicadas Love, Pamela, utilizó la plataforma para celebrar la comunidad LGBTQ+ y pedir que se siga avanzando en la lucha por la igualdad.
Anderson recibió el Premio Vanguardia del Centro de manos de Phillip Picardi y Mariana Marroquín, quienes destacaron la impresionante carrera de Anderson y su amplia labor filantrópica, dejando claro que su dedicación a la comunidad LGBTQ+ es profunda.
“Cuando vi a Pamela por primera vez como joven trans, vi a una mujer encarnando su belleza y su poder, y quise ejercer ese poder”, dijo Marroquín. “En su historia, siempre veo un trozo de la mía. Todo el mundo cree saber quiénes somos, pero somos más de lo que puedan imaginar”.
En su discurso de aceptación, Anderson reflexionó sobre su conexión personal con la comunidad LGBTQ+ y cómo sus experiencias han moldeado su activismo. Recordó su primer aterrizaje en Los Ángeles y su llegada justo a tiempo para el Orgullo, donde un par de homosexuales le llamaron la atención por sus malos reflejos.
“Me decían: ‘Cariño, ése no es uno de los colores de Dios’, y yo pensaba, Así es como pienso. Así es como hablo. Llegué. Voy a estar bien.“
Vi a una mujer que encarnaba su belleza y su poder, y quise ejercer ese poder.
Mariana Marroquín, de Trans Wellness Center
A lo largo de los años, Anderson ha utilizado su plataforma para llamar la atención sobre cuestiones críticas que afectan a la comunidad, como el VIH/SIDA, la discriminación y los abusos sexuales. También es vegetariana de toda la vida y activista comprometida con los derechos de los animales, algo que dista mucho del personaje cosificado en el que se la ha metido con calzador repetidamente a lo largo de su carrera.
Pidió a los asistentes que se imaginaran a sí mismos de jóvenes, a una edad en la que aún no estaban seguros de quiénes eran y en quiénes se convertirían.
“Ahora es cuando corremos hacia nuestros pequeños y les damos un abrazo enorme”, dijo. “Dales un beso en la mejilla. Mírale a los ojos y dile a esa personita: Te quiero mucho. Eres preciosa. Tienes talento. Eres digno. Tienes valor. Eres importante. Y vas a superar la vida con nota. Porque yo soy la prueba de que estoy aquí y siempre estaré aquí para ti y te quiero”.
Cada vez que salimos por la puerta, es arte escénico. Más vale divertirse.
Pamela Anderson
Agradeciendo el gran año que ha tenido con su docuserie de Netflix Pamela, una historia de amor y su bestseller Love, Pamela, Anderson hizo hincapié en su discurso en la importancia del amor propio y el respeto por uno mismo.
“La vida no es fácil. Nadie es perfecto y aprendemos cada día. Yo sigo en mi camino”, afirma. “Ama sin descanso. El mundo es un lugar seguro, y cada día pintamos el cuadro de nuestras vidas. Cada vez que salimos por la puerta, es una representación artística. Más vale pasarlo bien”.